Una puerta que nunca encontré, de Thomas Wolfe (Recomendación de la librería Rafael Alberti)
"Pero, sobre todo, «protagoniza» estas páginas extraordinarias el narrador, un Thomas Wolfe que, como él mismo confesaría, dibujó aquí todo su entusiasmo, toda su confusión y todos sus anhelos juveniles (sin saber que moriría poco después, y aún joven). Octubre de 1931, de 1923, de 1926, el mes de abril de 1928: un viaje en el tiempo por las estaciones clave en la naturaleza del país y por cuatro momentos esenciales en la vida del autor que muchos lectores reconocerán como parte de su propia vida".