La esposa diminuta, de Andrew Kaufman (Blog Librero a mi pesar, 13 marzo)
"Con un estilo narrativo sencillo, casi juguetón o distraído (quién sabe si no hubiera naufragado de haber optado Kaufman por una belleza estilística mayor), esta historia te atrapa, te empuja, te inmoviliza y te presenta un lógico laberinto, una serena locura de la que necesitas angustiosamente ver la salida, pero pides a gritos no salir. Una fabulosa sorpresa".