En Grand Central Station me senté y lloré, de Elizabeth Smart en Periférica
"En Grand Central Station me senté y lloré (1945) es el autobiográfico, libérrimo, obsesivo y lírico manifiesto de la escritora canadiense Elizabeth Smart en defensa del amor a ultranza y a cualquier precio, del amor platónico convertido en ovidiano, del amor exaltado que nació de la literatura -Smart cayó fulminada por la flecha de Cupido a los 24 años, enamorándose del poeta británico George Barker sin conocerlo y habiendo apenas leído unos cuantos poemas suyos en una librería londinense- y se consolidó en la literatura cuando Smart lo atrapó para siempre, como una mariposa atravesada por un alfiler, en la novela que ahora reseñamos y que se publicó a los cinco años de relación entre la autora y el poeta, con una tirada de 2.000 ejemplares que no le hacía justicia al éxito que acabó alcanzando en el mercado". (El País, Babelia, 19 diciembre).